Agosto 28

Miqueas 7:7

Yo empero á Jehová esperaré, esperaré al Dios de mi salud: el Dios mío me oirá.

Los primeros siete versículos de este capítulo nos presenta la condición humana. El cuadro es muy triste. Versículo 2 dice que el hombre bueno ha perecido de la tierra: y que y no hay ninguno recto entre los hombres. ¿Será exageración esto? ¿Si no es verdad, porque está el mundo en la condición en que se encuentra con el odio, las mentiras, la pobreza, etc. Si haces un trato de negocio, o prestas dinero, o compartes un apartamento con alguien, o dejas que alguien usa tu crédito, los problemas vendrán pronto. Versículo 4 dice: “El mejor de ellos es como el espino; el más recto, como zarzal.” ¿Qué se puede hacer entonces? La solución se encuentra en versículo siete. “Mas yo a Jehová miraré, esperaré al Dios de mi salvación.” Lo que este mundo de caos, sufrimiento, y problemas necesita es Jesús: Jesús en el corazón, Jesús en el hogar, y Jesús en el país. Padre Celestial, concédenos esta reformación, y que empiece en mí. Amén.

Comentario por Francis L. Harris

"...¿qué debo hacer para ser salvo?" Hechos 16:30