Octubre 26

1 Tesalonicenses 1:10

Y esperar á su Hijo de los cielos, al cual resucitó de los muertos; á Jesús, el cual nos libró de la ira que ha de venir.

Jesús está en el cielo a la derecha del Padre, esperando mientras los eventos profetizados se desenvuelven. Y mientras que él espera, nosotros también esperamos; esperamos su apariencia gloriosa cuando el volverá a este mundo para reinar como el Rey de Reyes. Este versículo nos dice dos cosas de Jesús: 1º. ¡Dios le resucitó de los muertos! y 2º. Jesús nos ha librado de la ira que vendrá sobre todo el mundo. Jesús nos libró de la ira de Dios que existía por nuestro pecado contra Dios y sus leyes, y por nuestra rebelión contra su autoridad. Pero este enojo de Dios contra los pecados del mundo sigue creciendo y acumulándose como las aguas acrecentadas detrás de una represa grande, y está reservado para aquellos que siguen en sus pecados y no se someten a Cristo, quien murió por nuestros pecados. ¡Pero todavía hay tiempo si tan solo te arrepientes de tu manera de vivir, y de los largos años que has vivido ignorando nuestro Salvador precioso quien nos amó, y se entregó a la muerte cruel de la cruz de Calvario para que pudiéramos tener perdón de nuestros pecados y tener un hogar en el cielo, y la vida eterna en el mundo venidero. Como dijo Juan el Bautista, déjenos huir de la ira que viene, y acudirnos a la salvación tan amplia y gratis que por ahora nos ofrece.

Comentario por Francis L. Harris

"...¿qué debo hacer para ser salvo?" Hechos 16:30