Diciembre 1

Malaquías 3:6

Porque yo Jehová, no me mudo; y así vosotros, hijos de Jacob, no habéis sido consumidos.

¿Por qué no perecieron los hijos de Jacob, o sea, Los Israelitas, cuando cruzaban El Desierto de Sinaí a Israel? Eran una nación de personas desobedientes que se quejaban continuamente. ¿Y por qué no son destruidos hoy, estando rodeados de muchas naciones que quisieran destruirlos? Hay solo una respuesta: LA FIDELIDAD DE DIOS. Cuando el empieza un proyecto, lo completará. Cuando NOSOTROS venimos a Cristo, y lo recibimos por fe, ¿Cómo sabemos que, aun siendo salvos, no vamos a perecer después de todo? Tropezamos, nos caemos, y a veces fracasamos. ¿Qué seguridad tenemos que al fin no vamos a perder nuestra salvación y estar excluido del cielo? Solo esto. DIOS ES FIEL. Jesús dijo: “Todo lo que el Padre me da, vendrá a mí; y al que a mí viene, no le echo fuera.” Juan 6:37. Nuestra salvación es construida y basada sobre LA ROCA SOLIDA DE LA PALABRA DE DIOS. El nunca ha empezado un proyecto que no ha completado. Yo reconozco me propia debilidad, y no tendría ninguna esperanza de llegar al cielo si no fuera por LA FIDELIDAD DE DIOS A SU PALABRA. Amén.

Comentario por Francis L. Harris

"...¿qué debo hacer para ser salvo?" Hechos 16:30