Diciembre 18

Salmos 51:15

Señor, abre mis labios; Y publicará mi boca tu alabanza.

Cuando nuestro CORAZON está sometido al SEÑOR, entonces nuestros LABIOS se abrirán a su alabanza. Todos nosotros somos elocuentes. No nos faltan palabras. Si recibimos un aumento en el sueldo, o si nuestro equipo hace un “gol”, entonces estamos muy comunicativos, muy expresivos. No quedamos callados. LO MISMO pasa en nuestra vida cristiana. Cuando dejas de andar en las tinieblas y el pecado, y te sometes a la voluntad de Dios, y ANDAS EN EL ESPÍRIU, entonces el gozo del Señor llena TU CORAZÓN, y las alabanzas del Señor brotan de TUS LABIOS. “Todo lo que respira alabe a Jehová. Aleluya. Salmos 150:6.

Comentario por Francis L. Harris

"...¿qué debo hacer para ser salvo?" Hechos 16:30